El té marroquí, llamado «Atay», es mucho más que una simple infusión. Es un símbolo de hospitalidad, de compartir y de tradición en Marruecos. Preparado con té verde chino gunpowder, hojas de menta fresca y mucha generosidad, se ofrece a cualquier hora del día, en cada visita, reunión o momento de relajación.
Los Ingredientes Tradicionales
- Té verde Gunpowder (importado de China)
- Menta fresca (a menudo la menta nana)
- Azúcar en terrones (en gran cantidad, según las regiones)
- A veces: ajenjo (chiba), verbena, flor de azahar o azafrán según las estaciones
La Preparación del Té a la Marroquí
- Enjuagar el té verde con agua hirviendo.
- Hervir de nuevo con agua fresca.
- Añadir la menta fresca y el azúcar.
- Hacer espumar el té vertiéndolo desde arriba para airear y mezclar bien los sabores.
¡La espuma blanca en la superficie es señal de un buen té marroquí bien logrado!
Un ritual social
- El té es servido por el dueño de la casa, a menudo tres veces seguidas:
- El 1er vaso es fuerte como la vida,
- El 2º es dulce como el amor,
- El 3º es amargo como la muerte. (Proverbio tuareg)
- Acompaña las comidas, las conversaciones, las negociaciones comerciales, e incluso las ceremonias religiosas.
Valores y Beneficios
- Digestivo y refrescante
- Favorece la concentración y la convivencia
- Refleja los valores marroquíes de generosidad, acogida y respeto
El Té en la Artesanía y el Turismo
- Bandejas de cobre, vasos de colores, teteras de plata: objetos emblemáticos
- El té forma parte de la experiencia marroquí en los riads, zocos y vivacs del desierto
